viernes, 27 de enero de 2012

Al yo que nunca fue.


Siempre he dicho que no se mentir, y la verdad es que quizás soy tan buen mentiroso...que ni yo mismo me doy cuenta.

Se lo dije a Lerias, sácate la bala o se te oxidará. Se te llenará el cuerpo de óxido negro y nunca sanarás.... Me he pasado la vida dando consejos y mirando a los demás, ayudando y olvidándome de mi. Yo, luego. Yo, después. Yo ahora, yo siempre. De un extremo a otro.

Se me había olvidado que eres ese disparo al corazón, que eres todo ese óxido, ese veneno que me impidió, apostar, disfrutar, sentir, perdonar, arriesgar, entregarme... Has estado siempre ahí, estuviste incluso antes de conocerte, y volverás en cada oscura noche en la que se me abran las heridas; y en cada lágrima irás implícita. En cada fracaso estarás patente... pues por mucho que siempre haya querido ser una estatua forjada, no soy en el fondo más que un jarrón que rompiste en mil pedazos, y todos sabemos que esos jarrones ya nunca vuelven a encajar cuando se les repara.

Me pedistes perdón mil veces, y yo te perdoné un millón. Entendí que ocurrió lo que tuvo que ocurrir, y tu entendiste que somos humanos y nos equivocamos. Pero nada de eso cambiará nunca la actual situación.

Se me había olvidado, totalmente.... te lo voy a explicar visualmente.

¿Sabes esas películas donde el protagonista se encuentra de pronto en un lugar fantástico, pacífico agradable y bello.... como un sueño; y de pronto la acción cambia?, la cabina del avión ha estallado, el aparato cae en picado, todo el mundo grita, los trozos de fuselaje le han herido de gravedad. El viento, la falta de oxígeno el dolor.... El protagonista está apunto de volver perder la consciencia, va a volver a ese mundo tranquilo....ese mundo que ahora sabe es falso. Dato que pronto no importará, o que mejor dicho...es siempre irrelevante. Total, ¿quién define lo que es real y lo que no?

Abuso de los puntos suspensivos.... Losé.

Sabes, puedo intentar caer más abajo, tengo las armas para ello... Sólo me separa un cable de conectar el HD de 2004-5. ¿Pero sabes qué? Estás muerto te suicidaste delante mía, yo te ví morir. Y yo fui quien se quedó con el cuerpo desecho y la vida rota.
Tu te quedastes con todas las sonrisas....yo con todas las lágrimas, el camino fácil para ti, para mí el difícil.

Y ahora me dices que no hay solución, que nos rompimos para siempre, que nunca vamos a poder querer como entonces, que nunca vamos a dejarnos querer como aquella vez, que nunca más arriesgaremos ni será inocente ni mágico. Me haces por un segundo despertar de mi actual tranquilidad para devolverme a ese escenario a ese avión en llamas que se precipita al vacío, me haces sentir tan solo como me sentí en aquellos tiempos. ¿Qué es lo cierto, el avión o el sueño, la vida o la pesadilla? ¿A quién creo¿, ¿a un suicida paranoico o a mi?


El Sol siempre sale, y yo siempre sobrevivo.
La noche siempre pasa y yo siempre me acuerdo de todo.

Me acuerdo de quien me acogió, de quienes me escucharon, de quienes me soportaron...son tantos nombres que no vas a conseguir que sienta me solo durante demasiado tiempo.

LLevo levantandome toda la vida sin tu ayuda, incluso a veces soportando tu peso y el de los demás, ese es mi camino del guerro. Nada de grandes victorias, nada enormes batallas llenas de gloria y héroes. Mi camino del guerrero es levantarme una y otra vez, caer una y otra vez, intentarlo una y otra vez, fracasar una y otra vez.

Y volver a intentarlo, tirar, arrastrarme y levantarme a mí y a quienes me rodean. Y ni el barro, ni la soledad, ni los fracasos impedirán que así siga siendo, porque ese es MI CAMINO DEL GUERRERO. Y mis mil cicatrices dan fe de ello.

Pero, Es Importante.... Es importante.... Ya lo dijo uno de los grandes, que mejor, lo diga la canción : )




*En el texto, por si alguien lo duda, me dirijo en casi todo momento a mi mismo. Y es que, nuestra mente es demasiado grande para que dentro sólo quepa una personalidad. Yo le escribo a esa que estuvo al mando durante tantos años, y que sin darse cuenta por poco hunde el barco en el que el resto vivíamos.

3 comentarios:

  1. al yo que nunca fue, nunca serás ni quisiste ser.

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  2. *En el texto, por si alguien lo duda, me dirijo en casi todo momento a mi mismo.

    ¡Qué mentiroso!

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  3. El otro día me acordé bastante de tí María, Por cierto, ¿todo bien?

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